¡¿Quién eres… quiénes son?!
Un diálogo…
-
Dime qué dicen de ti y
te diré quién eres
-
Que me esperan hace
tiempo, que en tres meses todo estaría todo en orden, que me olvidaron, que me
dormí, que me despertaron…
-
Fácil, muy fácil: sos
el expediente de horas cátedra de la Subsecretaría de Deportes.
El 8 de mayo del 2015 nos citaron a una reunión en el
Polideportivo Martín Fierro. Representantes del sindicado mayoritario, del área
pedagógica y de (los muy mal llamados) Recursos Humanos anunciaron con bombos y
platillos que ese mismo día, Francisco Irarrazábal, el Subsecretario de
Deportes, había firmado un expediente pidiendo que lxs trabajadorxs con tareas
docentes en planta permanente pasen a tener horas cátedras. En tres meses se
haría realidad. Promesa (en un año muy electoral…). Un reclamo histórico
parecía estar al alcance de la mano. La vida se dice fácil pero es
difícil. El expediente salió de Deportes y se fue a dormir una soberana siesta
al área de (los muy mal llamados) Recursos Humanos de la Ciudad. Mientras tanto,
trabajadorxs de la Subsecretaría, que nos venimos organizando paso a paso
(algunxs sin afiliación, otrxs afiliadxs a UTE, otrxs a ATE), planteamos, en
cada reunión que tuvimos con diferentes funcionarios y coordinadores de la
Subse, las insuficiencias del expediente: no sólo habían dejado afuera a
trabajadorxs sino que también la decisión había sido tomada
antidemocráticamente: ¿quién, cuándo y dónde había decidido que salga ese
expediente con evidentes arbitrariedades? Pero no sólo criticamos. Al mismo
tiempo, expusimos argumentos y razones (citando leyes, estatuto de Deportes y
de Educación) de nuestras posturas y nos ofrecimos incontables veces para
colaborar en la solución del problema.
El tiempo pasó, llegó el verano, las elecciones pasaron, y el
expediente dormía placidamente. Hacia fines de diciembre y comienzos del 2016,
el grupo de trabajadorxs de Deportes del que formamos parte, empezó a crecer.
De acorde a los tiempos que corren, armamos un grupo whatsapp y hoy somos varias decenas que estamos en contacto
cotidiano. Eso es muy valioso cuando estamos desparramadxs en cientos de
plazas, polis y villas, laburando en distintos días y horarios. Aunque no lo
veamos, somos un montón en un montón de lados. Y sin nosotrxs la Subse no hace
nada.
Sigamos
con las desventuras del expediente, el bello durmiente. Comunicadxs full time, decidimos juntarnos en el
Parque Centenario para ver qué onda. Nos pusimos a averiguar hasta que
encontramos al remolón enredado en las sábanas de (los muy mal llamados) RRHH
de la Ciudad. Fuimos unas cuantas veces y llamamos unas cuantas mas para
alcanzarle el despertador a la funcionaria que lo tenía. Nos hacemos cargo, lo
admitimos, fuimos nosotrxs:
¡despertamos al expediente!
¿Y ahora qué?
¿en qué andamos? El recién despierto volvió a Deportes porque la cosa está mas
enredada que las promesas de otrora. Nosotrxs estamos atentxs y encima… porque
tiene el sueño muy fácil y una modorra
recurrente… La clave para nosotrxs es la siguiente: seguir comunicadxs,
socializar toda la información que tengamos y buscar las condiciones para poder
decidir nosotrxs mismos sobre las condiciones laborales que nos afectan a
nosotrxs a mismos.
Dos diálogos…
-
Dime tus licencias legales y te diré
quién eres
-
No tengo ninguna licencia legal
-
Mmm…mmm… ¡Ya sé… sos una trabajadora
POF de la Subsecretaría de Deportes!
Tres diálogos…
-
Hace varios años que todos los años el Jefe de Gobierno de turno
decreta la creación de la plata transitoria docente y no docente para el “Plan
deportivo del año que corresponda” que desarrollará la Subsecretaría de Deportes.
-
Ah, vos decís lxs trabajadorxs POF.
-
Así es.
-
¿Todos los años?
-
Sí, porque el decreto –que es como la palabra de Dios pero en la
boca del Jefe de Gobierno- dice que es “transitorio” y te pone fecha: hasta el
31 de diciembre ¡Qué poder de predicción!...
-
¡Maqué predicción ni que ocho cuartos! ¡Eso es precarización
laboral de punta a punta…!
Veamos un poco más. El decreto dice más cosas, como para
que no nos queden dudas. Pasen y lean:
“… el personal comprendido en el presente Decreto
será designado con carácter transitorio, carecerá de estabilidad, cesará
automáticamente a la fecha de finalización… y podrá disponerse su cese
anticipado sin expresión de causa.”
El decreto de este año lleva por número el 188. Y avala la
contratación de 715 trabajadorxs POF. Y como si esto fuera poco, los salarios
para la gran mayoría de lxs trabajadorxs bajo esta contratación suenan a una
mala broma. Haciendo un par de cuentas se llega a un resultado indignante: en
Educación, por la misma cantidad de horas de trabajo, el salario es casi el
doble.
Y como
si esto fuera poco (¡Sí, hay más!),
no hay ni una resolución, ningún decreto, ningún acta, ni siquiera un papelucho
que formalice legalmente las licencias que corresponderían a lxs trabajadorxs que
estamos bajo esta modalidad de contratación. Para decirlo sin medias tintas:
legalmente no tenemos ni una licencia.
Pero
todos sabemos que alguna vez nos tomamos un día por examen, por enfermedad,
etc. ¿Cómo es posible, entonces, si no hay nada legal que ampare esos días?
Todo depende de la buena onda que tengamos con los “superiores”. Y si tenemos
mala onda, ahí sí que se nos aplica la ley y la letra del decreto del Jefe de
Gobierno se hace cuerpo en nosotrxs: “cese anticipado sin expresión de causa”.
Para enfrentar
esta precarización laboral de punta a
punta es que nos venimos organizando hace un buen tiempo. Lo primero e
imprescindible es ponernos en contacto y socializar toda la información que
tengamos. Luego, generar las instancias para decidir colectivamente cómo
avanzamos por aumento salarial, licencias y estabilidad laboral. Para depender
de nosotrxs mismxs y no de los humores de “lxs de arriba”. Y hay que empezar a
repetirlo: las horas cátedra también tienen que ser para lxs trabajadorxs que
estamos con estos contratos precarios, porque tienen que ser para todxs lxs
trabajadorxs que cumplimos funciones docentes.
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